domingo, 18 de enero de 2009

Piel

No quería estar y se fue. Pero cuando llegó se dio cuenta que tampoco quería estar en ese lugar. Se volvió a ir. Una vez allí echó de menos el primer lugar y pensó que si le pasaba eso era porque tampoco quería estar allí. Se fue. Otra vez. Pero esta vez fue una marcha triste, lloraba y lloraba. Y aunque sabía que se debía de ir y estaba absolutamente convencida de ello, se sentía el ser más triste del universo. Quizá no se quería marchar realmente, esta vez dejaba mucho por el camino. Quizá estaba demasiado cansada de cambiar de lugar con tanta fecuencia. Se equivocaba. Era un problema de piel. Se mudó con todas sus cosas pero se dejó la piel en cada rincón de aquella casa oscura. Había piel de ella por todas partes, en el baño, en la cocina, en el sofá y, por supuesto, en la cama. Había capas superiores y capas profundas. El suficiente tejido epitelial como para crear otro ser humano igualito a ella y a tamaño natural. Pero estaba toda desperdigada y, como era muy blanca y transparente, cualquiera que en esa casa hubiera barrido no la hubiera visto y la hubiera mandado al cubo de la basura junto con un montón de pelusas, los restos de las migas de pan de la última cena y demás materia orgánica e inorgánica que pulula por el suelo de una casa normal y corriente. Pero era piel viva, con sentimientos y sensaciones, que sentía miedo al ser barrida y soledad por no formar parte ya de ese cuerpo con el que nació.

Ya no volveré a tener piel, me di cuenta esta mañana mientras cerraba la caja de los zapatos mágicos. Mi piel se quedó enredada en un caleidoscópio que le da vueltas y la marea, aunque no la hace cambiar de color. Allí está. Y yo aquí, sin ella. Se podría pensar que ahora estoy mejor, que me he deshecho del dolor, del calor, del sudor, de los salpullidos... Pero no es así, ahora estoy en carne viva y no tengo barrera para algunos sentimientos que se infectan en mi cuerpo y me hacen enfermar de pena. No puedo parar de llorar, y es mucho peor, porque se me seca la carne de la cara.

Mi piel no quiso venir conmigo y ahora estoy siempre desnuda. Sé que no es probable que volvamos a estar juntas. Deambulo por la vida sin piel. No quiero otra si no la mía. Pero me quedé sin ella. Ya nada volverá a ser igual.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

She's thinking I'll never know
That she burns like an angel
Into her fire she goes.

She puts her hand next to me
She says give me one reason
Why I should be here again.
But then she blows out the candle
And shows me the reason again.

Cause she loves like an angel
She burns like an angel on fire
On fire

And she's stuck
When she comes on so hot.
And you have never felt
A heavenly slow burn.
I'm so hot,
When I leave her cold,
Frying in her room
Like angels always do.
And did you really think I loved you
Just cause I said so?

She says heaven forgive me
Am I going to pay for my sins?

Cause she burns like an angel
Everytime she lets me in...

Jeanne dijo...

Welcome Lotte.

Me alegro que hayas vuelto y si lo haces sin piel, no importa.

La piel se regenera....somos hijas de Eva....la que se comió la serpiente y no la manzana....mejor comerse al enemigo y hacerse pasar por él.

Lo dicho...me alegro de verte.

J.

AliaS dijo...

te lo dije mujercita, este texto repite esa sensación de apnea, de silencio, de llevarle las manos a la boca como si con ello pudiera calmar ese desasosiego q me provoca saberte sin piel, en carne viva, llorando de los corrillos al cuarto y andando por la calle sin saber si me dejarías q te abrace aunque lo único que quiero luego de esto es abrazarte, abrazar a esa mujer sin piel que a la vez al mirarla me alegra saber que está mudando algo, mucho o todo de sí. y el abrazo para correr al dolor se convierte en un abrazo de celebración por la mujer nueva que está dejando todo detrás al precio de perder su piel.
realmente me encantó este texto
cariño!
deberías explorar este recurso narrativo, digo, la brutal metáfora del dolor, de la pérdida de una parte nuestra.
es lo que somos Lotte, solo seres mutando en forma permanente desde que nacemos, y la piel es una d las parte de nuestro cuerpo que a diario muta, cambia, nuestra metamorfosis visible.

besotes

pd. ganas de abrazos sin distancias...

pd. canciones de martes a la noche, de miércoles al amanecer...http://www.goear.com/listen.php?v=4dfab5d