martes, 8 de septiembre de 2009

Recordatorio.

Buscando mis instintos, esos que debiera tener y no tengo, esos que harían de mi una mujer como es debido, esos que dicen que en la vida hay que tener algo más que zapatos y libros, me olvidé de cosas que siempre me causaron satisfacción. Buscando mi vena maternal, mi instinto de protección, me olvidé de proteger y cuidar lo que he sido. Quién te ha visto y quién te ve... Y no es que ahora pretenda cerrar los bares y caminar quince centímetros por encima del suelo, pero no puedo aspirar a olvidar lo que soy. Bastantes cosas me parece que he tenido que ir soltando en el camino, que si miro alrededor, a veces pienso que estoy a punto de conertirme en todo aquello que siempre he repudidado. Y estoy de acuerdo que a veces no queda otra que pasar por el aro, que por muy idealista que sea una, tiene que adaptarse a las nuevas situaciones para poder sobrevivir, pura selección natural. Pero no debo olvidar mi esencia. Esa que me hizo pelear, romper y llorar. Aquí estoy, con nueve kilos más, en un cuerpo que apenas reconozco, tratando de asumir que en breve mi vida cambiará para siempre, pero intentando acoplar aquello que siempre fui a la nueva situación. Un puzzle con piezas correctas que no terminan de encajar. Siempre odié los puzzles, me ponen muy nerviosa. Está claro que mi sueño de ser una gran cuentista cada vez está más lejos, pero tengo que recordar lo feliz que me hacía soñar...

Y aunque sea políticamente incorrecto, creo que no puedo evitar ser la que soy. Mujer por encima de todo, por encima de la maternidad y del amor. Áquella que vivía la vida con placer sexual, que tenía una mente libre llena de cosas a las que jamás nadie conseguirá acceder. A ver si consigo saber cómo se compagina esto con el olor dulzón de colonia de bebé...

Jamás me gustó estar encerrada, siempre lo odié.

3 comentarios:

patadegalo dijo...

Tengo a mi hija peluda hace casi 5 años; no llora por la noche ni huele a colonia. y a su hermano peludo hace 2. no le cambio los pañales, ni le quito los mocos. Pero desde hace 5 años no puedo ausentarme de casa por períodos de más de 9 horas,se me va gran parte del sueldo en ellos y no puedo improvisar una escapada, hay que pensarlo todo semanas antes. y a mí tampoco me gusta estar encerrada.

No sé qué tiene cuidar a un ser que depende de tí, pero en mi caso... desde hace 5 años soy mucho más fuerte / hago muchas más cosas / no soy cuentista pero pinto más que nunca / cuido más mi aspecto / me tomo una cerve de vez en cuando. Al final lo único que ha variado, es que como se me va gran parte del tiempo en los peludos, directamente NO PIERDO EL TIEMPO EN NADA QUE NO MEREZCA LA PENA. Y está claro que YO (yo mujer) sí lo merezco, y mis pequeños también. Gracias a ellos me he quitado muchos vampiros del medio, y quedamos la esencia; ellos y yo.

Afortunadamente no somos puzzles, seríamos siempre lo mismo.

AliaS dijo...

mi hermosa Lotte,
la vida nos ha ido llevando por ahí, a veces creo que vamos como canciones programadas en random, sonando o siendo con nuestras vidas nuestras propias bandas de sonido, escribiendonos como relatos que somos.
ha pasado mucho y sigue pasando,
entre medio te he hechado de menos, y regresar a vos,
a abrazarte
muy fuerte
y repetirt como un mantra
luz
luz
luz

besos inmensos en este momento d tu vida, siya sabés, sigo tus pasos, tu luz...

pd. damos una vuelta?
pd. http://www.goear.com/listen/8c35caf/deja-vu---cerati-cerati

Anónimo dijo...

El mundo es para conocerlo, explorarlo, vivirlo, algunos creen que el mundo está a la vuelta de la esquina.

¡¡¡Saludos!!!